Ajusta las probabilidades a tu favor

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«Audentes fortuna iuvat.»

– Proverbio latino.

Nos creemos muy inteligentes, creemos que jamás podríamos ponernos en una situación que no nos favorece; y cuando sí nos exponemos, creemos que estamos por encima de las estadísticas. ¿Cuáles son esos escenarios en tu vida que juegan en tu contra?

Vida profesional.

Hemos escuchado infinidad de veces el miedo -racional- de los padres sobre ciertas carreras que eligen sus hijos al convertirse en adultos. Su negación muchas veces se debe a las referencias que han tenido gracias a las décadas de vida donde han visto gente fracasar en ciertas ramas profesionales. Y sí, yo entiendo que como buen rebelde, te crees diferente, especial. Pero, a pesar del gran peso que ejerce sobre nosotros el impulso irracional, debemos guardar un porcentaje -por más mínimo que sea- a un pensamiento lógico.

Aquellos que realmente te quieren y te advierten sobre las bajas probabilidades de éxito económico en una carrera -porque el potencial dinero a futuro es uno de los grandes factores que nos lleva a tomar esa decisión- no lo dicen por miedosos o cerrados de mente; lo dicen por experiencia. ¿Hay remedio? Me gusta creer que sí.

Ludópata de tu propia vida.

La ludopatía es una enfermedad caracterizada por el impulso incontrolable de apostar. A pesar de que las apuestas ya son parte de nuestro día a día gracias a anuncios publicitarios o videojuegos que ganan dinero siguiendo un modelo parecido a un tragamonedas, la adicción a la apuesta sigue ocasionando que mucha gente sienta vergüenza y aleje a sus más queridos.

Posiblemente tú no seas un adicto a las apuestas y veas como inferiores en voluntad a aquellos que sí lo son; pero cualquier aspecto de tu vida se puede observar bajo la lupa de una apuesta. ¿Hablarle a la persona que te gusta? Es una apuesta en ti por el amor. ¿Salirse de casa de los padres? Es una apuesta por la independencia. ¿Pagar la inscripción al gimnasio? Es una apuesta por tu salud. Todo en esta vida es una apuesta, con algunas ganamos y con otras perdemos… ¿Elegir la carrera que se anhela o la carrera que se recomienda? A pesar de tener todas las probabilidades en tu contra y, desafiando la regla de oro: la casa siempre gana, decides aventurarte y luchar contra corriente en tu propia vida: apuestas por el trabajo que tanto sueñas.

¿Ser el casino o ser un apostador?

Muchas veces la gente, por capricho, se enfrasca en sus pensamientos y pone sus «sueños» como el factor más importante a la hora de tomar decisiones; aunque en gran medida sean apuestas sin sentido alguno. Así que aquí te va mi recomendación para que, a pesar de haber tomado un camino difícil, incierto y con gran incertidumbre, puedas posicionarte en el mejor lugar del tablero:

Estudia tu industria, analiza los números y calcula cómo puedes pasar de ser un apostador con las probabilidades en tu contra, a convertirte en el casino -la casa- que siempre gana.

Esto no garantiza nada: garantizada sólo tenemos la muerte; pero sí te puede colocar en una mejor posición y, tal vez, recorrer el camino inteligentemente hasta el final del tablero para pasar de ser un peón a convertirte en la reina.

La vida, para bien y para mal, es bastante cíclica, es muy medible. Tienen razón tus padres al momento de decirte que ser futbolista profesional es bastante complicado. Para poner datos duros, tan sólo en México para que un ciudadano (de toda la población de más de 129 millones de personas) sea profesional, debe ser parte del 0.007% de los que lo logran. Pero si juegas en academias juveniles, lo cual quiere decir que empezaste desde niño a jugar acompañado de un proceso formativo encaminado, tus probabilidades son mucho mejores, son bastante esperanzadoras:

1%

Perdón por defraudarte.

No es casualidad que de todos los amigos de la infancia que tuve a los cuales nos apasionaba el futbol y lo practicábamos todos los días y teníamos la ilusión de ser profesionales, ninguno terminara dedicándose a eso.

¿Flojera, falta de persistencia, conformismo? Si esto fuera un libro de autoayuda te diría que sí.

Simplemente: hay un 99% de probabilidad de no ser futbolista profesional aunque hayas llevado todo tu proceso desde niño. Esa estadística búscala y aterrízala a tu carrera.

Rápidamente haremos el cálculo con mi carrera: actuación. Digamos que te encaprichas no sólo al sueño de ser actor, sino al sueño de ser rico y exitoso en Estados Unidos. Aquí romperé corazones (el mío no porque lleva años roto):

  • Sólo el 2% de los actores logra vivir únicamente del oficio de la actuación en Estados Unidos.
  • Se estima que para ser parte de la clase media-alta, se debe ganar $124,424 dólares anuales; sólo el 10% de los actores gana más de 80 mil dólares al año.

Si analizamos estas dos cifras, de cada CIEN actores, sólo 2 podrán vivir únicamente de la actuación. Y de esos dos, sólo 0.2 podrán percibir un sueldo de clase alta. No, no se parte en pedazos a la persona, sino que sólo DOS de cada MIL actores ganarán ese sueldo soñado.

Si no te sentías lo suficientemente defraudado (si eres actor/actriz) un último dato:

Los latinoamericanos tienen menos del 5% en roles principales o roles ejecutivos en Estados Unidos. Por lo menos es casi 5 veces más probable que ser futbolista en México.

¿Hay alguna esperanza?

Evalúa el mercado.

Suena bastante complejo y profesional, pero con un par de búsquedas lograrás encontrar estadísticas.

Retomemos el ejemplo del futbol. Uno de los casos más sorprendentes me parece el de iShowSpeed. Si no lo conoces, es un streamer estadounidense que tomó como bandera el futbol (siendo de un país que no le importa ese deporte) para hablar ese lenguaje con la audiencia global. Con el tiempo, pasó a ser uno de los streamers más populares y exitosos gracias a su carisma, locura -claro, yo sé que podemos aplicar las mismas probabilidades y estudio del porcentaje de streamers que logran ser tan exitosos como él- y a un elemento que se ha convertido en una clave: hablar de futbol, especialmente de su admiración desmedida por Cristiano Ronaldo. Gracias a que tomó la decisión de hablar del deporte más famoso del mundo y volverse fanático de uno de los futbolistas más famosos de la historia, logró llegar a audiencias a lo largo del planeta.

¿Y toda esa historia para qué?

Speed no es futbolista profesional, pero considero que ha llevado una vida dentro del futbol mucho más emocionante que el 90% de los futbolistas mexicanos (por nombrar algo que conozco, nada personal): ha sido invitado a finales de Champions League -y pudo levantar el trofeo-; ha jugado en partidos de exhibición en los estadios más emblemáticos de Inglaterra llenos de gente junto a otros streamers, y youtubers; igualmente ha compartido la cancha en partidos de exhibición con leyendas del deporte; el presidente de la FIFA llevó el trofeo del mundial de clubes hasta su estudio de transmisión para promocionar su torneo… la lista sigue y seguirá.

Todos esos, eventos únicos e inigualables. Y él no es futbolista profesional. Es un joven que lleva años entreteniendo personas. Muchos de esos años, los primeros, encerrado en su cuarto jugando videojuegos para entretener a la gente.

Mi conclusión es, posiblemente el camino a convertirte en el gran profesional que tanto deseas no sea el tradicional.

Piensa.

Respuestas no te daré, no las tengo y, nuevamente, no es un libro de «superación personal».

En fin.

Y si al final lo intentaste pero no lo lograste, yo estaré orgulloso de ti. Cuando estemos muertos, si hay vida después de esto, cuéntame orgullosamente qué fue todo lo que intentaste.

«Ánimo, échele ganas, mijo

Se despide el que le habla al aire.

Hasta que mis palabras te alcancen.

Jorge Rosas.

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