Soy Jorge Rosas, y esta vez me cuestioné sobre la carga que la sociedad pone sobre nuestros hombros.
Las expectativas siempre han existido, pero ahora es más evidente que todo el mundo tiene que aparentar algo con tal de encajar. Pero, ¿encajar en qué?
En la Muerte de un viajante, de Arthur Miller, Willy Loman se enfrenta a sus fracasos personales y profesionales. Toda su vida ha perseguido la popularidad y una buena apariencia, pues cree que eso es el éxito y la felicidad.
Todo lo que había sido, todo lo que había soñado, se desmoronó ante la implacable realidad de las expectativas que nunca pudo cumplir.
En lo personal, yo no estoy en contra de las expectativas, siempre y cuando sean de nosotros mismos pero también siendo conscientes de nuestros límites.
La sociedad de los poetas muertos, es una película que refleja a un grupo de jóvenes que comienzan a cuestionarse a sí mismos y a desafiar las expectativas de las autoridades. Todo esto gracias a la influencia de la poesía, el arte y la expresión individual.
No importa lo que te digan, las palabras y las ideas pueden cambiar el mundo. Pero sólo si tienes el coraje de perseguir tus propios sueños, no los que otros han elegido para ti.
Así que abraza las expectativas; tus propias expectativas.
Este escrito, pero en video: (próximamente)